Los Aviones y la familia

Hoy es lunes 19 de julio si la memoria no me traiciona y no recuerdo mal. El próximo jueves 22 estaré volando hacia Valencia, para tomarme unas minivacaciones bien merecidas. No me causan demasiada simpatia los aviones, no me gusta verme encerrada junto con cerca de 200 desconocidos más en un bunquer que sobrevolará Madrid- Valencia en apenas treinta y cinco minutos. La razón, obviamente, el tiempo, ese que me ahorro a no ser que coja el tren o el autobús. Los trenes siempre me encantaron, me recuerdan los viajes de mi infancia a Cordoba, cuenta mi padre muchas veces que cuando yo apenas tenia dos años en uno de los muchos viajes que haciamos cada año hacia esa tierra, yo me mecia en mi asiento del tren y decia algo casi inteligible, excepto para mis padres. Me mecía casi todo el camino y cantaba: la bela, la bela, la bela, la bela, asi hasta que el tren llegaba a su destino o yo me adormecia de cansancio. La bela era mi abuela. Esa era mi mayor ilusión, no estar en el pueblo que tambien, sino estar con mis abuelos todo el verano. Hoy en dia casi es un lujo coger un tren, además de que ahora han cambiado la pagina de internet, la han modernizado según dicen y no hay manera de comprar un billete con antelación y beneficiarse de la dichosa tarifa web, ahora inexistente. los autobuses son un horror, aunque cada vez se parecen más a los trenes, siempre son mi ultima opción. Así que muy a mi pesar cogeré el avión. Me aterra la idea de subirme a él. La ultima vez que monté en uno fue el verano pasado a primeros deAgosto, la razón, el billete de ida me costo 1€ con tasas incluidas en RyanAir. Si, si, habeis leido bien, 1€. Despues durante el viaje pensaba, mira que si porhaberme ahorrado dinero ahora este bicho tiene un accidente y morimos todos. me acordaba de Lost en el viaje, aunque estaba segura que no tendría esa suerte. Finalmente me tranquilice y pense, bueno lo que tenga que ser será. Todo eso es 35 minutos de trayecto, la cabeza me iba amil por hora.